la medida de las cosas

Protágoras dijo hace siglos que el hombre es la medida de las cosas.

Siempre he pensado que era cierto, pero me asaltó siempre la duda, de que somos medidas inexactas, irreverentes, y sin embargo taxativas.

No somos constantes, cambiamos, de idea, de humor, de chaqueta y culpamos a nuestros sentidos de engañarnos cuando algo no es como habíamos pensado.
Por eso, somos como el río que nunca contiene el mismo agua, contiene agua, sí, pero no la misma.

Esta capacidad de mutabildidad que tenemos, nos hace más sencilla la supervivencia, pero no es a veces, sino pequeñas muertes de nosotros mismos, que vamos dejando nuestras pieles como las serpientes, en el lugar menos esperado.

A veces somos Sísifo, arrastrando una pesada carga de la que creemos que no podremos salir, otras veces esa carga parece ligera comparada al dolor de otra persona, a veces somos felices por cosas insignificantes, y otras con grandes cosas nos sentimos desdichados.

Yo decido, seguir siendo un río, sólo que quiero que haya cosas en mi que permanezcan cosas que no se vayan nunca y que son las que me definen.

También decido ser feliz con las pequeñas cosas, hoy voy a dormir y soñar cosas bonitas porque me han contado un cuento sobre un rey de un lejano país, y volver a ser niño no tiene precio.

Gracias :)